Lejos de casa, pero nunca solo: cómo lidiar con la soledad al estudiar en otro país

Estudiar fuera del país es una experiencia emocionante, pero también puede llegar a sentirse bastante abrumador. Pues no es fácil adaptarse a una nueva cultura, un idioma diferente y estar lejos de la familia y amigos puede generar momentos de soledad. Sin embargo, no estás solo en esto. Muchos estudiantes internacionales enfrentan este desafío y, con las estrategias adecuadas, es posible convertir la distancia en una oportunidad para crecer y crear nuevas conexiones. Aquí te damos algunos consejos clave para sobrellevar la soledad y aprovechar al máximo tu experiencia académica en otro país.

Tenga siempre una comunicación abierta

Según el diario El País, expresar emociones y preocupaciones es fundamental para aliviar la carga emocional. Buscar apoyo en compañeros, mentores académicos o profesionales de la salud puede ser el primer paso hacia la recuperación. Tenga en cuenta que la mayoría de las instituciones educativas ofrecen apoyo legal y emocional, así que si lo necesita no dude en usarlo. 

Únase a clubes o haga actividades extracurriculares

Participar en clubes, asociaciones o actividades extracurriculares lo ayudará a conocer nuevas personas y hacer amigos con sus mismos intereses. 

No pierda el contacto con sus familiares y amigos 

La tecnología actual permite mantener contacto regular con familiares y amigos en el país de origen. Establecer horarios para videollamadas o mensajes puede proporcionar estabilidad emocional y reducir la sensación de aislamiento.

Cree una rutina diaria 

Crear y seguir rutinas diarias, como horarios de estudio, ejercicio físico o momentos de ocio, puede aportar una sensación de control y normalidad en un entorno desconocido. El diario Excelsior recomienda establecer objetivos realistas para mantener el equilibrio y reducir el estrés.  

Asista regularmente a clases

La presencia constante en las aulas no solo enriquece el conocimiento, sino que también ofrece oportunidades para interactuar y formar lazos con compañeros, fortaleciendo la red de apoyo social.

Haga actividad física

El ejercicio regular es reconocido por liberar endorfinas, conocidas como las hormonas de la felicidad, que mejoran el estado de ánimo y combaten sentimientos negativos. Encontrar una actividad física placentera, desde yoga hasta deportes en equipo, puede ser beneficioso para su salud mental.

Encuentre un trabajo de medio tiempo

Obtener un empleo a tiempo parcial no solo alivia las cargas financieras, sino que también facilita la interacción social y la inmersión en la cultura local, enriqueciendo la experiencia internacional.

Busque ayuda de un profesional 

Si la sensación de soledad es persistente y afecta su bienestar general, es esencial buscar la orientación de profesionales de la salud mental. Tenga en cuenta que las universidades suelen ofrecer servicios de consejería para apoyar a sus estudiantes en momentos difíciles.

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